Empezamos por lo esencial… LA POSTURA
Empezamos por lo esencial… LA POSTURA
Uno de los aspectos de mayor relevancia en el mundo del entrenamiento y del ejercicio físico es la correcta ejecución de los movimientos (o simplemente posiciones) que llevemos a cabo. Gracias a que en la actualidad el entrenador personal dispone de numerosas fuentes de formación y actualización profesional, debemos de ser consciente de la relevancia que posee este aspecto. De hecho, si tras hacer una valoración inicial percibimos u observamos que su raquis está desanimado, que posee estructuras estabilizadoras inactivas, o que no es consciente de una buena posición (control voluntario de su cuerpo), lo más acertado sería empezar por ahí. Es decir, educar a nuestro deportista o cliente a asimilar posiciones y controles básicos del sistema musculo-esquelético. En definitiva, llevar a cabo una educación postural.
¿O vamos a permitir que un individuo haga series de peso muerto con una antepulsión de hombros, hipercifosis dorsal y una retrogresión pélvica? Pues no sería lógico, porque todo el mínimo beneficio que podría traer como consecuencia ese ejercicio, seguro será menor que el daño provocado a sus estructuras óseas y musculares, por repetidas acciones con raquis fuera de su linealidad fisiológica. Así, que empecemos por ahí. Empecemos por lo esencial, la postura.
Seamos conscientes y transmitamos la importancia de una espalda recta, una articulación escápula-humeral estable y activa, un abdomen y zona lumbar activa y protectora, una pelvis dinámica y controlada, así como unas posiciones de extremidades equilibradas. Iniciando el trabajo en mantenimientos isométricos y una vez dominados, en trabajos dinámicos.
En definitiva, eduquemos a nuestros clientes.
Feliz semana, ¡amigos!